viernes, 15 de febrero de 2008

¿EL MUNDO AL REVÉS?

Desde que la famosa crisis del crédito se despertó, los mercados financieros emergentes nos han sorprendido por la inusitada fortaleza que han mostrado. Y es que su comportamiento con respecto a los mercados de los países desarrollados ha sido bastante positivo.
Así pues parece que estamos en una situación económica mundial nueva, donde el crecimiento global está protegido de una fuerte desaceleración gracias al comportamiento de algunos países emergentes, liderados por China.
Estos países no solo tiene unas tasas de crecimiento envidiables, sino que sus reservas de divisas los han convertido en financiadores de corporaciones y entidades de países desarrollados.
Durante el mes de enero, los mercados emergentes han registrado una rentabilidad negativa, aunque sus caídas han sido más suaves que en EEUU o en Europa, debido a la desaceleración económica mundial reinante, pero las perspectivas de los expertos, es que tornarán a su evolución favorable a medida que la incertidumbre en el mercado se vaya despejando.
China y Brasil se sitúan en la cabecera de las apuestas más seguras, debido a su posición dominante en el mercado de las materias primas y a la solidez que están adquiriendo sus economías internas para contrarrestar la crisis del motor económico.
También México ha conseguido mediante un fuerte programa de infraestructuras que su economía sea menos dependiente de las exportaciones de petróleo a EEUU.
Así que esta dependencia de la economía interna de Latinoamérica y Asia, es lo que está permitiendo que no se vean arrastrados por los principales mercados mundiales. Situación que se mantendrá si EEUU no entra en recesión, en cuyo caso el impacto será mayor y mantener el ritmo de crecimiento actual será más difícil, desencadenando en las consiguientes pérdidas bursátiles.
¿Deberíamos pues, empezar a reconocer el papel que juegan las grandes economías emergentes y el lugar que deberían ocupar en las negociaciones económicas más importantes?.

EVA VEIGA

1 comentario:

linodelvalle dijo...

Lo cierto es que las principales economías emergentes han mostrado una fortaleza sorprendente. Las perspectivas económicas en estos países desde hace años es de alto crecimiento.
Sin embargo desde el punto de vista macroeconómico, estos países cada vez presenten un mejor comportamiento, debido a que sus crecimientos son más sostenibles y sus políticas monetarias más acertadas, confiriendo una mayor estabilidad a los mercados financieros locales, lo que se traduce en una disminución del riesgo de invertir en estos países.
Cabe pensar, que si países como China, India, Brasil, etc. siguen creciendo a los ritmos actuales, en pocos años adelanten a las principales economías mundiales. Este razonamiento ha llevado a muchos inversores a pensar que nos encontramos ante un desacople de los mercados emergentes respecto a los mercados de EE.UU y Europa,llevandolos a desviar sus inversiones hacia los principales mercados emergentes.
Esto es lo que ha ocurrido tras la crisis subprime, los inversores huyeron de las turbulencias en los mercados tradicionales hacia los emergentes, que aparentemente han estado a salvo del impacto de la crisis subprime y de crédito.
No obstante, el incremento en la confianza de los inversores hacia estos mercados podría llevar los precios hasta niveles insostenibles, dando lugar a severas correcciones. Por lo tanto no sería descabellado pensar en que la próxima burbuja, en un futuro no muy lejano, nos la encontremos en los mercados emergentes.