miércoles, 11 de febrero de 2009

Sistema de pensiones: ¿público o privado?

Esta es la pregunta que todos los ciudadanos nos estamos haciendo en los últimos meses. ¿Por qué? La respuesta es tan sencilla como que al ritmo que llevamos, el sistema público de pensiones español no tiene ningún futuro.

Esto se ve muy claro cuando se explica el funcionamiento de dicho sistema: a grandes rasgos su base es que los trabajadores de hoy pagan las pensiones a los de hace 50 años y al mismo tiempo esperan cobrar de los futuros trabajadores. Este sistema parece lógico y funcional pero con un pequeño matiz que lleva al traste con el método: la natalidad. La pirámide poblacional española es invertida, es decir que hay mas gente mayor (por lo tanto jubilada) que gente en edad de cotizar o próxima a hacerlo.

Por este motivo los expertos indican que esto no es sostenible y comienzan a buscar soluciones antes de que sea tarde. Una de las que se propone es un sistema privado basado en la capitalización individual de los ahorros de cada individuo (en chile lleva 15 años funcionando muy bien). Las ventajas que conllevan son importantes, tanto económicamente (esta demostrado que la rentabilidad de una cartera es mayor que la tasa de crecimiento de los salarios en un periodo de 40 años), como socialmente ya que se incrementa el ahorro y se despolitiza el sistema de pensiones.

Sin embargo esta solución no es el maná y la reforma que se plantea no es pasar del actual sistema de reparto a uno de capitalización. La reforma propuesta en este estudio consiste en darle a todos los trabajadores menores de 45 años que actualmente pertenecen al sistema de pensiones de reparto, la libertad de optar por cambiarse a un sistema de capitalización individual administrado por empresas privadas especializadas. Los que ingresen en el futuro a la fuerza de trabajo acceden automáticamente al sistema de capitalización individual. A los trabajadores mayores de 30 años que decidan cambiarse, el Estado les entrega un Bono de Reconocimiento que les compense, total o parcialmente (según la edad), por las contribuciones realizadas en el sistema de reparto.

Los que deciden no cambiar de sistema, los mayores de 45 años y los actuales pensionistas, permanecen en el sistema de reparto de acuerdo con todas sus reglas, incluyendo la actualización de las pensiones.
Por lo tanto, la mala noticia para España es que su actual sistema de pensiones no es viable. La buena noticia es que existe un modelo alternativo, que se ha probado que funciona, y que existen escenarios que hacen posible la transición gradual desde el actual sistema de reparto a uno de capitalización individual.
LUIS MIGUEL CASTRO

No hay comentarios: