martes, 16 de junio de 2009

Difíciles perspectivas de la economía ante la situación del mercado hipotecario

El mercado hipotecario ha sido una de las claves que ha desatado la crisis actual.

La recesión económica es debida a la falta de liquidez que existe en el mercado, y uno de los sectores más afectados ha sido el mercado inmobiliario.

En una época en la que el sector inmobiliario vivía su época más triunfante, le ayudaba un sistema financiero que otorgaba hipotecas indiscriminadamente por un importe que en ocasiones superaba el cien por cien del valor del activo hipotecado.

Esto provocó que en su momento tuviesen que buscar liquidez para no detener su oferta, lo cual consiguieron a través de las titulizaciones hipotecarias.

Pero esta tendencia se rompió en el momento en el que los compradores de titulizaciones se dieron cuenta del riesgo que entrañaba y cuando los niveles de morosidad provocaron quiebras inimaginables en el sistema financiero.

En abril el Consejo de Ministros aprobó un Real Decreto 716/2009, en el que se trata de poner límites a la práctica de titulización por parte de los bancos. La normativa más relevante se centra en que para poder titulizar, la relación entre el valor de tasación y el préstamo se reduce hasta el 60% y la concesión a las entidades de poder exigir al deudor mayores garantías cuando el valor del inmueble sufra depreciaciones mayores al 20%. Además la nueva normativa hace referencia a los tasadores aceptando cualquier tasación que proporcione el cliente siempre que el mismo este homologado.

En la actualidad, estamos ante un escenario de restricción de la oferta por parte de las entidades financieras, que interponen más trabas a la hora de conceder hipotecas, y si las conceden lo hacen a un diferencial más elevado que aquel al que estábamos acostumbrados.

Las más desfavorecidas por el aumento de diferenciales son las Pymes, han visto como han disminuido sus ventas, como han empeorado sus balances y en consecuencia como las entidades financieras les han recortado la liquidez, cancelando sus créditos y pasándolos a préstamos con diferenciales más elevados.

Mientras no se restablezca la normalidad en el mercado de crédito y el hipotecario, la crisis seguirá causando estragos, pues las Pymes conforman la mayor parte de nuestra demanda laboral y sin un mercado laboral consistente y estable no podremos hacer frente a la compra de vivienda, a un préstamo hipotecario… ni las entidades estarán dispuestas a concedérnoslo.

De momento las entidades financieras no parecen estar dispuestas a otorgar préstamos ni créditos, pues siguen con duras campañas para captar depósitos.

Mª Teresa Prieto Sánchez.

No hay comentarios: