miércoles, 3 de junio de 2009

Mucho ruido y pocas nueces

Estamos ante una dura etapa en cuanto a lo que el mercado hipotecario se refiere. La crisis de las hipotecas y del sistema de préstamos pone en cuestión, tanto la solidez y credibilidad de la red bancaria, como de los mecanismos de control que a lo largo de los últimos años han estado vigentes para conceder préstamos de cualquier tipo. La burbuja inmobiliaria, sobre la que tanto tiempo atrás se ha estado diciendo que estallaría, se ha dejado estallar sin que ni el gobierno, ni los bancos le pusieran freno.
La concesión de hipotecas o préstamos personales por encima del máximo endeudamiento permitido y con una financiación sobre casas sobrevaloradas se hacía con una facilidad increíble.
Por el contrario, en estos momentos dichas operaciones son absolutamente inaccesibles para muchos, otros no pueden pagar ya sus hipotecas y la venta de viviendas para familias sin otro recurso son sueños imposibles para muchos
El mercado hipotecario español es una de los más eficientes de la Unión Europea, pero las principales normas que lo regulaban se promulgaron hace más de dos décadas en una situación económica que nada tenía que ver con la actual. Por ello resultaba necesario reformar sus fundamentos para adaptarlo a los nuevos instrumentos y para ampliar las posibilidades de elección de las entidades y de las familias.
En momentos de crisis una buena refinanciación puede acotar de manera importante la situación económica dado que las hipotecas están muy bajas en interés. Este producto requiere cumplir unas ciertas condiciones, ya que en el sistema de concesión de préstamos han aumentado el tipo de garantías que exigen para conceder dicha refinanciación.
En mi opinión habría que cambiar muchas cosas en el futuro para no volver a tropezar en la misma piedra, sin embargo parece una utopia el pensar que las entidades deben volver a sus inicios y dedicarse tan solo a las funciones por las que comenzaron a existir, que no eran otras que dar y tomar prestado para incentivar la inversión y el consumo en la economía de un país.

Catuxa Yáñez

No hay comentarios: